jueves, 11 de julio de 2024
Un poema de "La cierva implacable", de Ana Castro
lunes, 3 de junio de 2024
"Lecciones de química" - Bonnie Garmus
domingo, 12 de mayo de 2024
"Antología de poesía queer" - Ángelo Néstore (ed.)
A los cinco días de publicar esta reseña, Roberta Marrero decidió irse dejando tras de sí un mensaje de amor que nos debe recordar que la lucha por los derechos lgtbiq+ sigue siendo necesaria. Y por supuesto, “¿Por qué ser una sola cosa cuando puedes ser miles?” Que la tierra te sea leve, Roberta.
viernes, 10 de mayo de 2024
"Melancolía americana" - Joyce Carol Oates (dos poemas)
El olvido era un cielo azul y familiar, hace tiempo.
Y el lago, también, familiar aunque ahora vuelto tinta.
¡Esa frontera de marismas refulgentes!
Un resplandor solar entre la oscuridad como
un ojo demoníaco.
Si es 1859, probablemente creas
en el alma radiante. Esa única vela blanca
en la proa del olvido.
¿O eres tú, un hombre en mangas de camisa,
ese solitario remero
en una barca invisible? Esforzándote en los remos
y sin tocar tierra jamás.
Como por un pulso avivado el final de las cosas
sopla desde el mítico Noroeste.
¡Ah, olvido! Ese sabor nudoso a alquitrán.
Ese olor a humedad en el aire.
No tendrás tiempo ni siquiera para una plegaria.
¿O te has vuelto un recorte de papel con camisa roja,
chaleco beige, sombrero de paja, una figura
sentada confiadamente
al filo del lago de pesadilla?
¿Un pescador? ¿Es eso lo que eres?
¿Y tu perrito?
¿Y el filo del abismo?
Ah, ¿dónde están los adultos que te amaban,
y hacían guardia?
*
THE COMING STORM
Oblivion was a familiar blue sky, once.
And the lake, too, familiar though now turned to ink.
That border of marshgrass luridly bright!
Sun-glaring mid darkness
as a demon eye.
If it's 1859 you believe, probably,
in the radiant soul. That single white sail
at the prow of oblivion.
Or are you, a man in shirtsleeves,
that solitary rower
in an invisible boat? Straining at the oars
and never to reach shore.
As by quickened pulsebeat the end-of-
things blows out of the fabled Northeast.
Oh, oblivion! That gnarly tarry taste.
That smell of airborne wet.
You won't have time even for prayer.
Or have you become a paper cutout in red shirt,
Beige vest, straw hat, a figure
jauntily seated
at the edge of the nightmare lake?
A fisherman? That's what you are?
And your little dog?
At the edge of the pit?
Oh, where are the adults who once loved you,
and stood guard?
(Martin Johnson Heade, The Coming Storm, 1859)
ESO OTRO
Se reían, pero no. Tú
no te acuerdas de eso.
Lo que crees recordar
no fue eso.
Sí, te acuerdas
de algunas cosas. Y
algunas cosas sí
ocurrieron. Pero no de esa forma.
Y de todos modos, no
a ti.
*
THAT OTHER
They laughed, but no. You
don't remember that.
What you think you remember— it
wasn't that.
Yes— you remember
some things. And
some things did
happen. Except not
that way.
And anyway, not
to you.
miércoles, 1 de mayo de 2024
"El último ramo de flores y otras historias" - Marjorie Bowen
Nunca había oído hablar de la escritora Marjorie Bowen, como tampoco de otras autoras oscuras de los siglos XIX – XX como Sophie Wnzell Ellis o Marie Corelli, hasta que Impedimenta recogió algunos de sus mejores relatos en una antología hace unos años.
Y por supuesto tampoco había oído antes los nombres de Joseph Shearing, George R. Preedy, John Winch o Robert Paye, que son algunos de los nombres de señor que Marjorie Bowen tuvo que adoptar como pseudónimos para poder publicar su obra en la opresiva sociedad eduardiana.
Marjorie Bowen nació en el sur de Inglaterra, en una pequeña isla de Hampshire al este de Portsmouth en 1885. Sus novelas históricas de misterio fueron pioneras en un mercado literario que cada vez demandaba más cantidad y variedad de relatos. Aunque sus libros de terror gótico son hoy muy buscados en todo el mundo, por el momento en España no nos resulta fácil acceder a sus obras traducidas al castellano, por lo que he podido comprobar. Así pues, celebro que se haya traducido al castellano esta pequeña colección de cuentos, a cargo de Shaila Correa y de la mano de la editorial La biblioteca de Carfax.
En estos cuentos encontramos elementos de terror sobrenatural pero también otros donde lo terrible proviene de lo más oscuro y profundo del alma humana, sin que el misterio finalmente tenga nada que ver en la trama. Una sucesión de atmósferas inquietantes, personajes oscuros y giros inesperados narrados con la delicadeza y el gusto por el detalle propios de su tiempo. Hay quienes han querido o han sabido ver entre líneas una fascinación de Bowen por el ocultismo y la magia oscura, detectando pistas que hacen pensar que quizá estaba interesada por el misticismo y lo desconocido más allá de utilizarlo como un juego literario o un ingrediente clave para añadir a sus historias y que estas se vendieran bien.
Como decía al principio, el hecho de que Marjorie Bowen fuera una mujer en una época en la que predominaba la misoginia y el sexismo en la industria editorial (tampoco hemos avanzado demasiado, en cualquier industria), hizo que tuviera que recurrir a escribir bajo pseudónimos masculinos para poder publicar con éxito y ser tomada en serio, algo que era una práctica común para muchas autoras de su tiempo. Como la mayoría del público lector es femenino y actualmente existe una conciencia generalizada de haber sido educadas, literariamente hablando, a través de la obra de señores en un desmesurado porcentaje, hay una tendencia a rechazar las obras de autores masculinos y elegir, esta vez sí libremente, fundamentalmente obras de mujeres. Esto hace que las editoriales hayan empezado poco a poco a priorizar la publicación de obras firmadas por mujeres y que unos pocos señores oportunistas hayan adoptado pseudónimos femeninos para firmar sus libros. Pero no os dejéis engañar por señores disfrazados. La experiencia de nacer y crecer como mujer en un mundo misógino y patriarcal no nos la van a venir a explicar quienes lo han tenido todo a su favor naciendo y creciendo como hombres en un mundo que les favorecía desde el principio en todos los aspectos. Eso sí que es sobrenatural. Y terrorífico.sábado, 30 de diciembre de 2023
"Trilogía de Cophenhague" - Tove Ditlevsen (fragmentos)
viernes, 27 de octubre de 2023
"Las gratitudes" - Delphine de Vigan
Había visto los libros de Delphine de Vigan mil veces en librerías pero nunca me había llamado la atención nada en ellos para empezar a leerlos y descubrir a esta autora. Hace un par de días, vi una recomendación de “Las gratitudes” de forma fortuita y me llamó la atención la excusa de la trama (el concepto de agradecimiento) así como los otros dos temas que trata de forma directa (el envejecimiento y el lenguaje). Así que me hice con “Las gratitudes” y lo leí en un ratito, porque es cortísimo.
Este libro ni de lejos se convertirá en uno de mis favoritos: vaya esto por delante. Pero tiene una serie de elementos que lo hacen digno de análisis en este blog, bastante descuidado por cierto.
La novela comienza cuando trasladan a un geriátrico a Michka, una mujer que está experimentando los primeros síntomas de la afasia y ha sufrido una serie de pequeños accidentes caseros que impiden que pueda continuar viviendo sola de forma segura.
Recientemente conocíamos la triste noticia que relaciona a Bruce Willis con la incapacidad de expresarse verbalmente (¡el tiempo no es importante, solo la vida es importante!); el caso de Michka en concreto sería una parafasia lexical, que le hace sustituir puntualmente algunas palabras por otras, con la particularidad de que la palabras elegidas, aunque erróneas, a menudo suenan de manera similar a las que originalmente quería decir. Delphine de Vigan juega muy bien con esto, eligiendo no solo palabras fonéticamente similares, sino que tienen una carga semántica que da pie a juegos muy interesantes, literariamente hablando, como en el fragmento a continuación:
Durante unos instantes, Michka permanece sumida en sus reflexiones.
—Debería estar prohibido envejecer. Pero, bueno, ya que estás aquí, aprovecho para decirte algo: me gustaría que me abreviaran.
—¿Cómo?
—Para mi falaral. Una abreviación…, unos canapés y se acabó. Como la señora Crespin, parece que estuvo muy bien la cosa.
—¿Quieres decir una incineración?
—Eso es. Pero que sean de sermón los canapés, no de paté.
—¿De salmón? Bueno, vale, me lo apunto, pero no corre prisa, supongo, no es algo inminente.
He leído que De Vigan confeccionó una guía de traducción para que los traductores conociesen perfectamente la intención de la elección de cada palabra “errónea” que emite Michka y pudieran así localizar la palabra precisa en el idioma de destino. Me parece que esto habla muy bien de alguien que se toma su trabajo muy en serio. Dicho lo cual, tampoco esperéis virguerías léxicas, quiero decir que como ejercicio literario está bien ejecutado pero tampoco es algo como para tirar cohetes. La gracia es que, al leer rápido, a veces involuntariamente “intercambias” algunas palabras por otras cuando no toca. Es decir lees algo y de momento crees que es una palabra que Michka ha malapropismeado y la lees pensando que es otra (realmente lees “otra” en tu imaginación) y resulta que no, que nos hemos adelantado y el término que realmente consta escrito no era ningún “error”, no había que sustituirla... Esto da lugar a caminos infinitos o mini subtramas que duran un segundo. Recuerdo que me pasó por ejemplo con “evolución” y “elocución” pero pueden darse miles de casos.
Para mí el fallo fundamental de este libro es que no tiene alma. A ver si me explico. Hay libros que durante las primeras páginas nos hacen creer que estamos ante un autor nuevo mínimamente prometedor, al que de entrada parece que dan ganas de seguirle la pista en lo sucesivo. Pero, tras leer un par de páginas más, nos damos cuenta de que es un producto editorial “perfecto”, diseñado a medida para el gran público y para hacer la película que también entre dentro de esos cánones establecidos… y terminamos la lectura solo porque nada indica que el libro esté “mal”, pero nos hemos tragado un producto, no una novela. Y que en lo sucesivo cuando alguien nos diga que ese es uno de sus autores favoritos sabremos que eso es algo que no habla demasiado bien de la persona como lectora. Que podía ser mucho peor si leyeran a Paulo Coelho o a Ruiz Zafón pero que esa persona no sabemos si le exige mucho a la vida pero desde luego no a la literatura. Con estas editoriales grandes suele pasar: a veces publican libros pero la mayoría de las veces publican oportunidades editoriales (textos sin ninguna calidad pero que tratan un tema popular en redes sociales o cuyo autor tiene muchos seguidores, ya sean humanos o bots) o subproductos que en el mercado funcionan porque los lectores cada vez tienen menos criterio. La sociedad está idiotizada y el coeficiente intelectual está disminuyendo muy rápido en las nuevas generaciones, pero este es otro tema y no es cuestión de ponernos aún más pesimistas.
Volviendo a los aspectos interesantes de la novela, la reflexión sobre el paso del tiempo (el envejecimiento) y el concepto de gratitud son dos temas que se entrelazan en esta obra, como sucede en la vida real en ocasiones. Michka ve cómo sus facultades se desvanecen como arena entre los dedos y busca aprovechar el tiempo que le queda para resolver asuntos pendientes que no dejan de rondarle por la cabeza. Solicita ayuda para tratar de localizar a unas personas que le ayudaron en un momento extremadamente delicado de su vida, para tener la oportunidad de darles las gracias ya que no lo hizo en su momento.
Esto irremediablemente nos invita como lectores a reflexionar sobre nuestra propia vida y revisar si hemos dejado algo sin decir o si hemos expresado gratitud a quienes lo merecen, antes de que sea demasiado tarde. (Ya sabéis, cuando los aviones se estrellaron contra las Torres Gemelas que yo sepa ninguna de las llamadas telefónicas de los que estaban a bordo fue de odio y venganza; todas fueron mensajes de amor). Podemos tener muchas conversaciones pendientes pero que merezcan la pena quizá no tantas. Es decir, no vale de nada retomar la relación o tener una última conversación con quienes ya aprendimos que no funciona, tras demasiados intentos fallidos. Tampoco vale de nada tener una última conversación con alguien a quien no creeríamos lo que nos dijera porque nos mintió constantemente mientras estuvo en nuestra vida, dejándonos el corazón en mil pedazos. En el contexto de la familia, las relaciones a veces suponen mucha complejidad, ¿siempre hay que perdonar a los progenitores por el simple hecho de serlo, aunque nos dañen irremediablemente, aunque definitivamente sean malas personas? A veces una idea que surge de una buena intención puede derivar en desastre.
Este libro trata también, sutilmente, el tema de la perdurabilidad de las penas infantiles: el logopeda que atiende a Michka, especializado en geriatría, reflexiona cómo en su experiencia trabajando con ancianos y lenguaje ve a través de sus recuerdos cómo el dolor del niño sigue ahí. Intacto. Puedo leerlo en sus caras y escucharlo en sus voces. Y es que la infancia es el patio donde jugamos el resto de nuestra vida.
“Las gratitudes” es un pequeño reflejo luminoso de la condición humana, una llamada a la introspección personal y emocional a través de sus páginas. Si bien la novela no me ha conquistado en su conjunto, sus juegos de palabras y la delicadeza con la que aborda temas esenciales, como la inevitable fragilidad que acompaña al envejecimiento, la convierten en una respetable elección literaria. La escritura puede ser un faro que ilumine las profundidades de nuestra existencia y nos invite a reflexionar sobre las complejidades de la vida y de las relaciones humanas. Si os interesa leer una obra breve que aborde estos temas, esta novela puede ser una buena elección.
domingo, 22 de octubre de 2023
Louise Glück (Nueva York, 22 de abril de 1943 — Cambridge, 13 de octubre de 2023)
lunes, 24 de julio de 2023
"Matar la geografía de los cuerpos de piedra" - Laura Sanz Corada
en la mudez cartográfica
posibilidad o borrón
¿cómo encuentra la ruta
de su migración hacia el agua?
Avanzar con brújula pero sin mapa (a lo Javier Marías). Perder el sendero y entre la espesura del bosque darse cuenta de que la brújula no funciona. Avanzar a tientas, tropezarse sin parar. Y aun así seguir caminando en cualquier dirección porque cualquier salida mientras sea salida será válida y hagas lo que hagas será muy dolorosa. Pintar el mapa sobre este cuerpo de mujer. Recordar que... la vida sigue creciendo alrededor. Rizoma, Deleuze.
All afternoon it rained, then
such power came down from the clouds
on a yellow thread (...)
Mary Oliver
Toda la tarde llovió, y luego
en el recuerdo previo al agua,
una figura blanda
se entregaba al aire.
Sí me acuerdo llovió
Y después, en la humedad,
con el pasto envuelto en alas,
el cuerpo se convirtió en fábula.
Los versos de Mary Oliver inspiraron el inicio de este poema de Laura Sanz, a partir de una traducción libre. No podía dejar de ponerlo porque es una dulzura y porque dio lugar a unos momentos preciosos durante la presentación virtual que mencionaba al principio: desde Grieta propusieron que cada chica escribiera algunas líneas a partir de este increíble comienzo, "Toda la tarde llovió, y luego / en el recuerdo previo al agua...". Os dejo con el pequeño texto que nació de todas.
Toda la tarde llovió, y luego
en el recuerdo previo al agua...
me encontré abrazada a la tierra mojada
buscando un refugio para esta cuerpa exhausta,
oliendo la tierra,
a la frontera del vuelo de la libélula,
escuchando el latido del río
mientras en el vientre nace la calma
el reflejo del sol brilló
y un latido se escuchó nacer
en la tierra húmeda
el vientre rompió el latido
tomaron el vuelo las libélulas
.a tierra se hace latido
libélula, acompaña ahora
el nacimiento de una frontera.
domingo, 19 de febrero de 2023
"La canción de la luciérnaga" - El adiós del gran David González Poeta (1964-2023)
...libre y bravía como el mar |
David era alguien más que un escritor al que admiras.
Leo sus libros desde que era una cría que iba al instituto y de eso han pasado muchos, muchos años. Durante un tiempo, mientras vivía en Madrid, no me perdía ninguna de las presentaciones de libros o recitales a los que él se desplazaba. Atesoro con mucho cariño una carpeta con sus emails en mi correo electrónico.
A mí me parece que en esta foto es la Literatura la que besa a David, porque creo que eso fue lo que le pasó en la vida.
Quienes conozcan su historia y sepan cómo descubrió la poesía y cómo se convirtió en el poeta maldito de su generación, sabrán de lo que hablo.
Si he de morir...
Su obra está repartida en una inmensidad de editoriales y colecciones tan caótica que no siempre es fácil localizarlos, pero algunos de los títulos son relativamente fáciles de conseguir.
domingo, 27 de noviembre de 2022
"84, Charing Cross Road" - Helene Hanff
11 abril 1969Querida Katherine:Interrumpo la tarea de limpiar mis estanterías y me siento en la alfombra, rodeada de libros por todas partes, para escribirte unas letras y desearos un buen viaje. Espero que tú y Brian lo paséis muy bien en Londres. El otro día me preguntó por teléfono: "¿Vendrías con nosotros si tuvieras dinero para el viaje?", y a mí se me saltaron las lágrimas.Pero... no sé..., tal vez sea mejor que nunca haya estado allí. Soñé tanto con ello y durante tantísimos años... Solía ir a ver películas inglesas sólo para familiarizarme con las calles. Recuerdo que años atrás un muchacho al que conocía me dijo que las personas que viajaban a Inglaterra encontraban exactamente lo que buscaban. Yo le dije que buscaría la Inglaterra de la literatura inglesa, y él asintió y me dijo: "Está allí."Tal vez sea cierto, o tal vez no. Porque ahora, al mirar a mi alrededor en la alfombra, siento una certeza: está aquí.El hombre, ¡dios lo bendiga!, que me vendió todos mis libros murió hace pocos meses. Y el dueño de la tienda, el señor Marks, ha muerto también. Pero Marks & Co. sigue allí todavía. Si por casualidad pasas por el 84 de Charing Cross Road, ¿querrás depositar un beso en mi nombre? ¡Le debo tantísimo...!Helene